Arte y belleza transformadora
El prólogo de Dorian Gray como manifiesto artístico y vital.
La historia de Dorian Gray es una devoción por el arte y la belleza que acabó salvajemente. La tragedia de un chico ingenuo que en una fracción de segundo vio su vida como una carrera loca hacia la decadencia y la fealdad, y quiso congelar su belleza y juventud, tal como lo habían retratado en el cuadro.
El deseo es tan intenso que se le concede.
A partir de ahí, utiliza su belleza y juventud como cheque en blanco para entregarse a todo tipo de placeres y cometer todo tipo de acciones, la mayor parte moralmente cuestionables.
Oscar Wilde escribió el prefacio de su obra un año después de la publicación de la novela en la revista Lippincott, para su edición como libro. Su temática polémica revolucionó la sociedad de su época y aún hoy día nos hacen pensar sus epigramas y paradojas sobre la vida, el arte y las relaciones humanas en general.
Wilde representa la parte anglosajona del decadentismo francés/simbolismo, el movimiento esteticista, que pregonaba el «arte por el arte» o lo que es lo mismo, el arte se aprecia por lo que es, sin la necesidad de que tenga una enseñanza o mensaje moral. ¿La tiene El retrato de Dorian Gray?
¿La intención de Wilde? A saber…
Creo que nadie se pone de acuerdo al día de hoy en la intención real de Wilde con el mensaje subyacente de su novela (¿lo conocía él?), pero de lo que si estamos seguros es que nos ha hecho pensar, y mucho.
Dejando a un lado su juego de palabras e intenciones que dura hasta nuestros días, nos concentraremos en su Prefacio, que escribió para acallar las voces que tildaban su obra de inmoral.
Si quieres adentrarte más en los temas de la obra, no te pierdas la primera entrega de Academia Gótica:

El arte y el artista
Según Wilde, «el artista es el creador de cosas bellas», el que «no desea probar nada», el que «no tiene simpatías éticas» y que «no es morboso» porque su condición [de artista] le permite «expresar todo». Estas declaraciones se dieron en el contexto de la defensa de su libro frente a los críticos, pero si lo vemos en el contexto actual, individual, ¿cuántas veces nos ponemos obstáculos en nuestra labor creativa, porque pensamos que no sabemos lo suficiente, o no tenemos tanta experiencia, o cualquier otro pensamiento limitante? El artista es capaz de todo, no pide permiso, ni se disculpa, porque se siente seguro del discurso que desea transmitir. La lección es crear con libertad, desde el inevitable error, desde el vértigo del no saber. Haciendo es que se sabe.
Revelar el arte y ocultar el artista.
Para Wilde, el arte es más importante que el artista, insisto, en el marco del Prefacio (la novela te hace pensar mucho sobre esto). Hoy la percepción es diferente porque vivimos desde el exhibicionismo, donde pesa más los eventos que rodean la vida del artista, más que el arte en sí mismo. Los que se dedican solo a su arte y no se «ventilan» no venden.
Hay una explicación sobre esto más adelante en la novela, por parte de Lord Henry:
—Basil, mi querido muchacho, pone en el trabajo todas sus mejores cualidades. La consecuencia es que para la vida sólo le quedan los prejuicios, los principios y el sentido común. Los únicos artistas encantadores que conozco son malos artistas. Los buenos sólo existen en lo que hacen y, en consecuencia, carecen por completo de interés como personas. Un gran poeta, un poeta verdaderamente grande, es la menos poética de todas las criaturas. Pero los poetas de poca monta son absolutamente fascinantes. Cuanto peores son sus rimas, más pintoresco es su aspecto. El simple hecho de haber publicado un libro de sonetos de segunda categoría hace a un hombre absolutamente irresistible. Vive la poesía que es incapaz de escribir. Los otros escriben la poesía que no se atreven a poner por obra.
Cap. 4
En el desarrollo de la novela hay una matización sobre esto. Lord Henry Wotton cree que la vida puede elevarse a obra de arte. La muerte de Sybil, con la tragedia real que le rodeó, puede expresarse como una tragedia en el sentido artístico del término. Sybil muerta, víctima de un accidente que todos saben que fue un suicidio, es la obra de arte «la que pasa a otra esfera» según Lord Henry. Es la que deja atrás la artista, una actriz de teatro mediocre y de baja cuna que ya nadie recuerda. También es elevada a categoría de arte la vida de Dorian, por sugerencia e influencia del propio Lord Henry. Aquí Dorian es la obra de arte de perfecta e imperecedera belleza, mientras que su artífice se esconde en la oscuridad de un ático.
El espectador
Tanto la más alta como la más baja forma de crítica es una forma de autobiogafía.
Wilde afirmó esto sabiendo que las cosas no son como el artista las crea, sino como las percibimos. El contexto nuevamente fue la defensa de su novela ante los críticos de su tiempo que la tachaban de inmoral, pero trayéndolo a nuestro tiempo, ¿no se trata de lo mismo? Cuando nos acercamos a una obra artística irremediablemente la apreciamos con nuestro cúmulo de experiencias. El me gusta o no me gusta va unido al conocimiento y experiencia de mundo del sujeto que emite la opinión. Es la forma en la que quedan retratados, no por el valor de la obra, sino con la construcción de pensamiento que tenga.
«Cuando los críticos no tienen la misma opinión que el artista es que este está de acuerdo consigo mismo».
La utilidad del arte
A un hombre le podemos perdonar que haga algo útil siempre que no lo admire. La única excusa para hacer una cosa inútil es admirarla infinitamente.
Todo arte es completamente inútil.
En la sociedad de Wilde, las obras literarias contenían una enseñanza moral, y que él abiertamente vaya en contra de ese sentido (al menos en el Prefacio) lo convertía en foco de polémicas. Ocurre un poco lo mismo hoy con los libros que alberga la categoría de negocios, autoayuda y similares. Cualquier otro libro que indique entretenimiento o lo que es peor, un libro clásico, que a través de sus enseñanzas obligue a pensar y a la autoevaluación, es cosa poco útil. No deja dinero ni beneficios y se mira de otra manera. Nuccio Ordine tiene un excelente manifiesto sobre la utilidad de obras clásicas y la necesidad de seguir recurriendo a ellas para ser mejores personas.
¿Qué otras enseñanzas has detectado en el prefacio-manifiesto de El retrato de Dorian Gray?
Prefacio
por si no lo has leído:
Referencias:
Paradoxes in O. Wilde’s “The Picture of Dorian Gray”, Manana Dalalyan, Armenian Folia Anglistika, October 2013.
Paradox and the Preface to "Dorian Gray", Eric Pudney, The Wildean, No. 41, July 2012.
Una canción que recuerda a Dorian: